Afectadas por venta de packs señalan que autoridades les ponen trabas para denunciar la ciberdelincuencia
NOTICIAS VOZ E IMAGEN DE OAXACA “Mi caso empieza en el 2018, de repente me llegaron muchas solicitudes de amistad de hombres. Me parecía muy extraño. Un día estando en consulta médica me llegó un mensaje en Messenger advirtiéndome que tuviera cuidado porque mi pack circulaba en redes sociales. Yo nunca había compartido fotografías de este tipo. Era mi cara, no mi cuerpo. Primero pensé que era como una mala broma, no le tomé tanta importancia hasta que comenzaron a acosarme con imágenes y frases obscenas”. Desde ese momento, a Arlet, nombre ficticio utilizado por su seguridad, le fue arrancada su salud emocional y psicológica, así como la tranquilidad. “Sentía temor hasta para ir a la tienda. Tenía mucha inseguridad”. En un primer momento acudió ante la policía cibernética en donde le indicaron que tenía que presentar una denuncia penal, hecho que -le enfatizaron- era casi imposible, pues Arlet desconocía quien había realizado una carpeta con la fotografía de su perfil de Facebook un