La celebración del día
de muertos en la cultura triqui, simboliza un ritual que invoca a los espíritus de los
ancestros para invitarlos a convivir, en el mundo terrenal.
Esta
tradición es una de las muestras de culto más importante, es por eso que estas
comienza a partir del 15 de octubre o antes de la festividad de San Lucas
–Luzfan--, en estas fechas las personas
empiezan a trabajar en la limpia de los platanares, cafetales para que la
cosecha sea buena. Si los trabajos de limpieza no terminan de hacerse, la
cosecha no dará fruto y todo saldrá mal.
Según
la tradición Triqui las compras para el altar de muerte no se deben de hacer
antes del 15 de octubre , ya que las frutas y comida se echan a perder, y si esto no se hace así se aparece un señor con características de una persona
muy pobre; con ropa rota y remendada,
cargando un petate viejo, conocido como Chiiñuun o San Simón , por lo tanto la creencia dicta si se
compran las cosas para los muertos
durante estos días ya no tendrán valor, porque de forma inmediata le
corresponde al San Simón.
Cuentan los triquis que después de las 3 plazas muertos instaladas en Juxtlahuaca, Putla y Copala, ya se pueden hacer las compras de lo que se utiliza en altar. Por ejemplo compran novillo y las personas apartan las piezas para sus altares, maíz para totopo.
Cuentan los triquis que después de las 3 plazas muertos instaladas en Juxtlahuaca, Putla y Copala, ya se pueden hacer las compras de lo que se utiliza en altar. Por ejemplo compran novillo y las personas apartan las piezas para sus altares, maíz para totopo.
En
este sentido, Eleazar Ortiz, habitante
de San Juan Copala, dijo que para llevar este rito se buscan ramas secar, mismas que servirán para adornar con flores de
cempaxúchil para el día 31 de octubre, en tanto que los día 30 y 31 de octubre, el señor de la casa mata una res , y entonces se empieza a anunciar para que
las personas aparten sus piezas para el mole de la comunidad.
Ortiz,
señaló que la festividad del día de los muertos se
dividen en dos partes, la primera es en donde celebramos el día de los niños
que es el 31 de octubre, la segunda el
día de todos los santos , que es el día primero de noviembre, para la primera
celebración se compran veladoras chicas,
platos, plátanos, cañas , chile, sal, frijoles , todas las cosas que se
necesitan para ese día.
Antes de empezar a adornar los altares se le riega agua o refresco, para la bienvenida de los animas.
Antes de empezar a adornar los altares se le riega agua o refresco, para la bienvenida de los animas.
Después
hace una ofrenda para que se humee con copal , que simboliza el un llamado a los espíritus, señaló que conforme van pasando los platillos
llaman a sus seres queridos que pasen a sentarse a comer, para ello, se pone un
platillo especial y todo tipo de frutas en la ofrenda de muertos.
Cabe
hacer mención que esta se levanta al siguiente día, las flores y
veladoras con que se arreglaron se tienen que guardar debajo del altar y se
retira el día nueve; día en que se regresan los difuntos a sus hogares.
El
habitante de San Juan Copala dijo que
desde hace tiempo inmemorial se rinde culto a los difuntos con ceremonias
especiales y altares, ya que faltando 8 días empiezan a limpiar la vereda para
la bienvenida de los difuntos, primero se arman seis u ochos horcones con
cabeza en forma de “Y”, los cuales son
clavados en el suelo. En las cabezas de estos horcones son apoyados con ramas gruesas de madera, las cuales soportaran el
altar, y dependiendo del tamaño del altar será el número de apoyos,
generalmente tres o cuatro pares de horcones.
Las varas son fijadas firmemente con amarres a
los horcones. Sobre las varas es colocado un tapeteado de varas de una planta
llamada “xchunn ranuun”, el cual será el
altar. Después se coloca hojas de platanar verde como mantel, esto representa
vida. Se colocan imágenes y fotos de los seres queridos en la pared de lado
donde sale el sol. El altar es adornado con palos pequeños , cuyos extremos superiores son adornadas con
flores de cempasúchil y pata de león .
Sostuvo
que el espacio que se queda de bajo de
la mesa es adornado con flores de palmillas adornadas en el frente con flor de
cempasúchil. Con las palmillas adornadas de esta forma también se hacen arcos,
esto hace más decoroso el altar, pero esto depende de las cantidad de flores
que se haya cosechado y la disposición de las mismas. Otro adorno del altar
incluye las flores de “rnauú” -- esta flor es blanca y representa la pureza del
espíritu--.
Eleazar
Ortiz refirió que desde el año de 1960 que el pueblo completo hacen tequio en
la comunidad para dar la bienvenida a los difuntos , pues, la mayordomía de la
comunidad de San Juan Copala celebra a los difuntos que en algún momento fueron
asesinado y que ya tienen familiares en este mundo terrenal y de esta forma las
animas puedan tener un encuentro y sean recordados.
Dijo
que se hace una novena de oraciones, además de que el altar se levanta después
de los nueve días de terminar estas celebraciones de esta manera todas las
almas en pena tienen la oportunidad de llevarse algo al más allá.
La
simbología del número 9
Ortiz
dijo que el número 9 tiene un significado muy especial para la cultura Triqui ,
ya que si los difuntos son más de nueve, se tienen que llamar por sus nombres y
para la comida se tiene que aumentar otros nueves platos, si son menos, tienen
que llamar a los que no tienen familiares para se complete. La regla común es
que se cuenten 9 platos en la ofrenda.
Dijo que “al pie del altar se pone una cruz decorada con flor de cempasúchil y otro en el panteón. Todas las personas de diferentes comunidades bajan a San Juan Copala y llevan un jarrito de tepache, caldo de res y pozole y se colocan 9 platos, 9 totopos y nueve vasos para este festín de los muertos”.
El número de estas varitas tiene que ser nueve
o dieciocho dependiendo del tamaño del altar, ya que el número 9 y sus
múltiplos representan las almas del más allá. Así también se adornan nueve o
dieciocho barritas más de dos metros aproximadamente. Estos son colocados en
forma horizontal en grupos de tres o cuatro formando cuadros a las orillas del
altar. Muchos también colocan arcos encima de dichos cuadros, estos arcos
representas la bienvenida a los muertos, además de que a los 9 días se levanta
el altar debido que son 9 días los que tarda el difunto en regresar a su nueva
morada.