Lesli Aguilar
HUAJUAPAN
DE LEÓN, Oaxaca.- Tras las presuntas
agresiones sufridas por parte de los comuneros de San Sebastián Nopalera hace algunos días, los habitantes de Zimatlán
de Lázaro Cárdenas en distrito de Tlaxiaco exigieron al gobierno del estado la
aplicación de medidas cautelares otorgadas por la Comisión Interamericana de Derechos
Humanos (CIDH).
En
este sentido, el presidente del Centro de Derechos Humanos y Asesoría a
Pueblos Indígenas (CEDHAPI), Maurilio Santiago Reyes, manifestó que el día 4 de febrero, aproximadamente a las
nueve de la mañana, habitantes de San Sebastián Nopalera incendian uno de
los parajes de la desviación a de Zimatlán de Lázaro Cárdenas,
durando el incendio la mayor parte del
día.
De
igual manera sostuvo que ese mismo día se originó otro incendio en la zona
conocida como El Guapinol, por lo que muchos de los comuneros se sintieron amenazados
y pidieron la presencia de las corporaciones de
Seguridad Pública, sin embargo existió muy poca respuesta.
Explicó
que desde ese día hasta la fecha son más de 5 incendios los que presuntamente
han sido originados por los comuneros de San Sebastián Nopalera, comunidad con
la que Zimatlán mantiene un conflicto agrario por la posesión de tierras, no obstante,
los habitantes de la última comunidad son beneficiarios de medidas cautelares.
Manifestó
que en reiteradas ocasiones han pedido al titular de la Secretaría de Seguridad
Pública (SSP) que realice un operativo en la zona, pues, las detonaciones e incendios
en parajes cercanos a Zimatlán son constantes, por lo que está en riesgo la
vida de decenas de personas.
Detalló
que desde el 1 de enero de este 2018 , la única patrulla que vigilaba la
comunidad fue retirada con los cuatro elementos, por lo que temen un ataque y
que exista una masacre, indicó que es una obligación del estado garantizar la
seguridad de las mujeres, niños, ancianos y personas de la tercera edad de esta
comunidad.
Manifestó
ha existido muy poca respuesta de las autoridades tanto federales como
estatales, por lo que buscaran la manera
de que organismos internacionales intervengan y que se garantice la vida de las
personas que aquí habitan.
Argumentó
las personas que habitan este municipio en la región de la Mixteca salen hacer
sus actividades diarias con miedo, por lo que es necesario que la patrulla que
mantenía la vigilancia regrese.
Cabe
referir que la pugna entre estas dos comunidades es por 439 hectáreas de tierra
que se encuentran ubicadas en la región Mixteca.
Finalmente Santiago Reyes especificó que las
mesas de trabajo para conciliar la paz entre ambas comunidades están vigentes
desde noviembre del 2015 sin que hasta la fecha se obtengan resultados.